BORNOUT Y EL EVANGELIO
OSCAR MARTINEZ
OSCAR MARTINEZ
Vivimos en una época en la que todo parece moverse rápido. Entre la escuela, las redes sociales, las actividades extracurriculares, los amigos y las expectativas de nuestras familias, es fácil sentirnos abrumados. A veces, podemos sentirnos tan cansados que no es solo un cansancio físico, sino algo que también nos afecta por dentro, mental y emocionalmente. Este tipo de agotamiento es lo que muchos llaman "burnout" .
El burnout es un término que se ha usado desde los años 70 para describir un estado de agotamiento extremo. No es solo estar cansado después de un día difícil, sino que es cuando te sientes completamente “quemado” , como si ya no tuvieras energía ni motivación para seguir adelante, y esto empieza a afectar tus estudios, tus relaciones e incluso cómo te sientes contigo mismo.
Este agotamiento puede suceder cuando pasamos mucho tiempo haciendo cosas que nos exigen demasiado, como lidiar con la presión de las calificaciones, las expectativas de los demás o las dificultades personales, sin tomarnos un descanso adecuado. A veces, ni siquiera notamos que estamos llegando a este punto hasta que ya nos sentimos totalmente desgastados.
La Biblia nos muestra que el trabajo y el cansancio son parte de la vida desde que el pecado entró en el mundo. En Génesis 3:17-19, Dios le dice a Adán que, a causa del pecado, el trabajo será algo duro y fatigante. En otras palabras, el cansancio y las dificultades son parte de la vida, y esto incluye las demandas y presiones que enfrentamos hoy, como los estudios, el trabajo y las relaciones complicadas.
Pero aunque el cansancio físico y mental es parte de la vida, no es lo que Dios quiere para nosotros a largo plazo. Él nos ofrece algo mejor, algo más profundo que simplemente "descansar un poco" . En medio del agotamiento, Dios nos invita a encontrar verdadero descanso en Él.
Uno de los momentos en los que Jesús habló del descanso fue en Marcos 6:31. Sus discípulos estaban trabajando tanto que ni siquiera tenían tiempo para comer. Jesús, al ver lo cansados que estaban, les dijo: "Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco.
" Imagina cómo se sentían los discípulos. Probablemente estaban agotados, abrumados por todo lo que tenían que hacer, muy parecido a lo que sentimos cuando estamos a tope con exámenes, tareas, compromisos familiares y la vida social. Y ¿qué hace Jesús? Él los llama a descansar. No les dice: “Sigan trabajando” o “No pueden parar” . Al contrario, Jesús los invita a detenerse y a recargar energías.
Esto nos enseña algo muy importante: Dios quiere que descansemos. No se trata solo de dormir más (aunque eso es importante), sino de descansar realmente en Su presencia, apartarnos de las preocupaciones y encontrar paz en Él.
Una de las maneras más hermosas en que la Biblia describe el descanso que Dios nos da es en el Salmo 23:2-3, que dice: "En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.
" Aquí, Dios se presenta como un pastor que cuida de nosotros. ¿Alguna vez has visto cómo un pastor cuida a sus ovejas? Él se asegura de que estén bien alimentadas y protegidas, y cuando están cansadas, las lleva a un lugar seguro para que descansen. Eso es exactamente lo que Dios quiere hacer por nosotros. Él no solo nos da un descanso físico, sino también uno que toca lo más profundo de nuestro ser. Dios nos da paz, calma nuestras preocupaciones y nos guía en el camino correcto.
Detente y ora: A veces, cuando estamos cansados, lo último que pensamos es en orar. Pero hablar con Dios y pedirle que nos dé fuerzas es lo que más necesitamos. Ora para que te dé sabiduría para manejar tu tiempo, y también para que te dé la paz que solo Él puede ofrecer.
Aprende a decir "no": Es importante reconocer que no puedes hacerlo todo. A veces, el agotamiento viene porque tratamos de cumplir con demasiadas expectativas. Dios no espera que seas perfecto ni que hagas todo. No tengas miedo de decir "no" cuando sea necesario.
Descansa en la Palabra de Dios: Leer la Biblia nos recuerda las promesas de Dios y nos ayuda a enfocarnos en lo que realmente importa. Pasar tiempo en la Palabra es como tomar un respiro espiritual, permitiendo que Dios nos hable y nos renueve.
Rodearte de apoyo: Habla con amigos, líderes de tu iglesia o tus padres cuando te sientas abrumado. No tienes que enfrentar el burnout solo. Dios usa a las personas que nos rodean para darnos apoyo y recordarnos que no estamos solos.
Conclusión: El verdadero descanso está en Jesús
El burnout es una realidad que puede afectar a cualquiera, incluso a jóvenes. Pero la buena noticia es que Dios no nos deja solos para que enfrentemos el cansancio y la presión de la vida por nuestra cuenta. Jesús te invita a encontrar descanso en Él. No solo un descanso físico, sino uno que trae paz a tu alma, calma tus pensamientos y te renueva por dentro.
La próxima vez que te sientas abrumado, recuerda que Jesús te llama a apartarte con Él, a descansar en Su presencia y a confiar en que Él es capaz de llevar tus cargas. Como dice el Salmo 23, Él es el buen pastor que nos guía a pastos verdes y aguas tranquilas. En Él podemos encontrar el descanso verdadero que nuestras almas necesitan.
Pastor Oscar Martínez está casado con Wendy, juntos tienen tres hijos: Mateo, Abigail y Elisabet. En el 2017 inició la plantación de la Iglesia Bíblica Casa de Dios (El Fuerte), donde actualmente sirve llevando la visión estratégica y el ministerio de predicación. El pastor Oscar Martínez está comprometido con la re-plantación y plantación de más iglesias. Es director del ministerio juvenil Nexgen